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lunes, febrero 05, 2007
En Montevideo hay poetas poetas poetasque sin bombos ni trompetas trompetas trompetas van saliendo de recnditos altillos altillos altillosde paredes de silencios de redonda con puntillo.Salen de agujeros mal tapados tapados tapadosy proyectos no alcanzados cansados cansados que regresan en fantasmas de colores colores coloresa pintarte las ojeras y pedirte que no llores.Tienen ilusiones compartidas partidas partidas pesadillas adheridas heridas heridas caeras de palabras confundidas fundidas fundidas a su triste paso lento por las calles y avenidas.No pretenden glorias ni laureles, laureles, laureles solo pasan a papeles, papeles, papeles, experiencias totalmente personales, zonales, zonales elementos muy parciales que juntados no son tales.Hablan de la aurora hasta cansarse, cansarse, cansarsesin tener miedo a plagiarse, plagiarse, plagiarsenada de eso importa ya mientras escriban, escriban, escribansu mana su locura su neurosis obsesiva.Andan por las calles los poetas poetas poetascomo si fueran cometas, cometas, cometasen un denso cielo de metal fundido, fundido, fundido impenetrable, desastroso, lamentable y aburrido.En Montevideo hay biromes, biromes, biromesdesangradas en renglones, renglones, renglonesde palabras retorcindose confusas, confusas, confusas en delgadas servilletas como alcohlicas reclusas.Andan por las calles escribiendo y viendo y viendolo que ven lo van diciendo y siendo y siendoellos poetas a la vez que se pasean, pasean, paseanvan contando lo que ven, y lo que no, lo fantasean.Miran para el cielo los poetas, poetas, poetas como si fueran saetas, saetas, saetas arrojadas al espacio que un rodeo, rodeo, rodeo hiciera regresar para clavarlas en Montevideo.
Será por eso que nos llama tantO?
biR 4:44 p. m.
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